Hoy os presento un apartamento, que a pesar de estar en la fría ciudad de Oslo y tener una base en blanco, me parece original y que tiene mucha calidez. Se sitúa en el barrio de Grünerlökka, uno de los barrios más trendy y divertido de la capital noruega. Como siempre que me fijo en un piso, me suelo decantar por la mezcla de estilos y materiales. En éste en concreto vemos una combinación de piso señorial con los techos altos, molduras y paredes en blanco, con otras pintadas dándole un aspecto de cemento pulido, madera rústica y ladrillos al estilo loft. La cocina está perfectamente integrada con el salón, los muebles lacados en blanco brillo tienen su continuidad hacia al salón a través de un aparador del mismo estilo que trabaja como nexo de unión. Entre los muebles de estilo actual vemos también piezas de diseño clásico del XX, con algunos elementos de estilo étnico y otras piezas rústicas que aportan la calidez a la estancia. Pero lo que más me gusta es esa habitación infantil que se abre hacia el salón con la mítica cunita Juno sobre la cual hay un cuadro retroiluminado que a mí desde lejos me parece una chimenea y me da calorcito (no sé si será esa la intención). Otros detalles como la lámpara, los juguetes de estilo vintage o la piel de cordero sobre la silla también ponen una nota original a este piso que me ha encandilado. ¿A vosotros os ha gustado?
Silvia Vallejo, Kulunka Deco




Fotos Koolcreative via The Design Traveller. Fotógrafo Sveinung Brathen